miércoles, septiembre 30, 2009

LOS PATRICIOS 2 Diaz Canales/Gabor -Ed. Glénat-

Bueno, pues vamos a darnos un paseo en aeroplano, con un piloto inepto y un alcalde pesado...un poco de color de el tomo dos...a suivre...

miércoles, septiembre 23, 2009

El espíritu del vino


Este último fin de semana fui invitado al festival de Tours (Francia) junto a Mon y Raule y Roger ( ¡cuantas risas, muchachos! ¡que bien me lo pasé con vosotros! ) he disfrutado de una ciudad tan bonita (lo siento no hice fotos, fuí sin cámara así soy yo :S pero os remito al blog de Raule) y he conocido a la gente de la organización todos geniales y simpáticos, especialmente Greg un tipo fantástico.
Todo lo bueno que tiene viajar conocer gente nueva, costumbres distintas, otros idiomas y otras ciudades, preciosa por cierto, recomiendo su búsqueda en google.

Ahora toca preparar otro festival más allá por diciembre: El Festival de Bd de Angers (Muy cerca de Tours) y en ese festival de Bd se hace junto a los viticultores de la zona ( buena combinación, vino y tebeos MMM!!) y a los autores presentes se le solicita una etiqueta de vino (voluntariamente, se entiende.) para después ponerla en sendas botellas. Así que aquí va la mía, para vino tinto ( o "Vin Rouge" como dicen por allí) he dudado que hacer durante mucho tiempo pero como siempre a última hora he decidido sacar al espíritu del vino fuera de su caldo...¡HIPS!...salud!

lunes, septiembre 07, 2009


"Entonces arribamos a una costa bella y gozosa, repleta de flores de todos los colores, en la que, hasta donde alcanzaba la vista, podíamos ver hermosas arboledas y radiantes pérgolas al sol del mediodía. De los emparrados de más allá nos llegaban estallidos de canciones y retazos de lírica armonía, entremezclados con leves risas, tan deliciosas que acucié a los remeros en mi ansiedad por alcanzar el sitio (...) En esa tierra no hay fronteras, ya que más allá de cada panorámica de belleza se alza otro aún más hermoso. Por sus campos y entre el esplendor de sus ciudades vagan a placer gentes alegres, todas ellas tocadas por una gracia pura y alegría sin tacha. En los eones que residí allí, vagabundeé ebrio de felicidad a través de jardines en los que alzaban pintorescas pagodas, sobre macizos placenteros, y en donde los paseos blancos están bordeados de delicadas flores, Remonté colinas amables desde cuyas cimas pude avistar fascinantes panoramas de ensueño, con antiguas poblaciones acurrucadas en valles, y con cúpulas doradas de ciudades en el horizonte sin fin.

Y contemplé el mar rutilante a la luz de la luna, los promontorios de cristal y el plácido puerto donde aguardaba anclada la Nave blanca."

"La Nave Blanca" H.P. Lovecraft, 1919.